Aunque nacido en Algeciras desde muy pequeño vivió en diferentes lugares debido a la profesión del padre, Administrador de Rentas Públicas, una vez que abandonó la carrera militar.
A los doce años la familia se establece en Madrid donde Manuel cursará sus estudios, quedándose pronto huérfano de sus progenitores debido a la epidemia de cólera que asoló Madrid en 1855.
Como consecuencia de su orfandad comienza a trabajar muy pronto como escribiente en el Tribunal de Cuentas y se casa seguidamente con Manuela Gallardo con quien tendrá tres hijos (Ángel, Carlos y María de Atocha).
Desde joven participó en una tertulia literaria y artística que bautizaron con el nombre de “La guardilla de los genios” de la que formaban parte, entre otros, Nilo Fabra, fundador de la Agencia telegráfica o los actores Rafael Calvo y Donato Jiménez.
Con apenas 21 años comienza a ejercer el periodismo y a publicar artículos y así seguirá durante más de 40 años.
Trabajador incansable, incluso ejerció de traductor en alguna ocasión, todo con tal de mejorar su precaria situación económica: “Humilde jornalero de las letras” se definió a sí mismo en 1877.
Fue incluso director de alguno de ellos: La Idea, que dirigió hasta 1859, El Teatro (1864), El Noticiero de España y La Independencia Española, (1868); La Gaceta Popular (1873) o El Cronista (1885).
Como redactor escribió en los principales periódicos más sobresalientes de la segunda mitad del siglo XIX como El Constitucional (1860), El Contemporáneo (1864), El Español (1865), La Ley (1867), Don Quijote (1869), Las Novedades (1870-71), El Eco del Progreso (1872), El Cascabel (1877) y como colaborador en Semanario Pintoresco Español, Diario de Avisos, Los Niños (1870-1876) y en muchos otros periódicos de Méjico, Cuba y Filipinas.
Su producción literaria es muy amplia y variada. Cultivó ensayo, poesía, teatro y novela, incluso literatura infantil con títulos como El año infantil, Álbum infantil: cuentos, máximas y enseñanzas en prosa y verso, Cuentos, fábulas y leyendas en verso etc. Pero lo que realmente le ha hecho pasar a la posteridad han sido sus alabados trabajos bibliográficos. Sus tres obras cumbre en este ámbito son: Galería biográfica de artistas españoles del siglo XIX, en dos volúmenes y publicados entre 1868-69 que recoge más de 2.000 reseñas biográficas de artistas españoles o que trabajaron en España; Apuntes para un diccionario de escritoras españolas del siglo XIX, y por último Ensayo de un catálogo de periodistas españoles del siglo XIX, en 2 vols y publicada entre 1903 y 1904, obra muy utilizada todavía hoy en día pese a sus carencias que recoge más de 10.000 reseñas biográficas de cuantos periodistas españoles hubieran colaborado en la prensa de entonces.
Otra de sus obras más emblemáticas fue su Viaje crítico alrededor de la Puerta del Sol que publicó por entregas en El Gobierno el 13 de abril de 1874 y terminó el 10 de julio de ese mismo año. El viaje es utilizado como motivo de denuncia social y para criticar las apariencias y falsedades de la sociedad pero todo ello con ironía y humor.
En la República de las Letras de 1877 hace objeto de su sátira al teatro, en concreto a la mala interpretación y falta de profesionalidad de los actores.
Se hizo eco en numerosos artículos sobre la pobre retribución que cobraban los escritores que apenas conseguían vivir pese a que tuvieran el reconocimiento del público. Fue muy reivindicativo con ampliar la cobertura a los herederos legítimos de la Propiedad intelectual, incluso formó parte de los fundadores de la Asociación de Escritores y Artistas. A su muerte se consiguió ampliar la cobertura de 50 a 80 años.
(Servicio de Información Bibliográfica)
Nace en Algeciras
Pierde a sus padres por la epidemia de cólera en Madrid
Director de varios periódicos desde La Idea hasta El Cronista
Publica en 2 vols. Galería biográfica de artistas españoles del siglo XIX
Publica por entregas su Viaje crítico alrededor de la Puerta del Sol
Publica La República de las Letras
Publica Ensayo de un catálogo de periodistas españoles del siglo XIX
Muere en Madrid